
El gobierno ruso advirtió que está preparado para realizar una prueba nuclear “de inmediato” en caso de que Estados Unidos decida romper la moratoria vigente y llevar a cabo una. El anuncio fue hecho por el viceministro de Relaciones Exteriores, Sergei Ryabkov, quien señaló que Rusia “mantiene listas sus capacidades” en el sitio de pruebas de Novaya Zemlya.
La declaración surge en medio de un aumento de tensiones geopolíticas y militares entre Moscú y Washington, y reaviva los temores de una nueva carrera armamentista nuclear. Ryabkov afirmó que el país sigue comprometido con el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT), pero enfatizó que “si otros lo violan, Rusia responderá con medidas equivalentes”.
Analistas internacionales advirtieron que este tipo de mensajes buscan presionar políticamente a Occidente en un contexto de sanciones económicas y disputas por seguridad energética. Por su parte, Estados Unidos no ha confirmado ni negado planes de reactivar sus propias instalaciones de prueba en Nevada.