
Un nuevo brote de ébola en la provincia de Kasai ha dejado al menos 57 casos confirmados y 35 muertes, informaron autoridades de salud y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Con una tasa de letalidad superior al 60 %, el brote ha generado alarma, en especial por las dificultades logísticas que complican la respuesta sanitaria.
La crisis sanitaria se agrava por la falta de recursos: el IFRC (Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja) estima que se requieren al menos US$ 25 millones para cubrir los próximos tres meses de atención, mientras que hasta ahora se han aportado solo alrededor de US$ 4,3 millones.
Las autoridades locales enfrentan retos como la inaccesibilidad del terreno, infraestructura sanitaria insuficiente y atrasos en la distribución de vacunas. Hasta el momento, se han vacunado alrededor de 1.740 personas, cifra considerada baja ante la magnitud del brote.