Desde Bruselas, el ministro español de Agricultura, Luis Planas, instó este lunes a no demorar más la ratificación del acuerdo de asociación entre la Unión Europea y el Mercosur, calificándolo como una “gran oportunidad” que involucra a más de 700 millones de personas y que, según él, ya no tiene obstáculos técnicos de peso que justifiquen su parálisis política.
Sus declaraciones llegan en un momento en que la Comisión Europea busca habilitar una entrada en vigor parcial del acuerdo, comenzando por su capítulo comercial, sin necesidad de aprobación individual por parte de los 27 Estados miembros, lo que permitiría destrabar años de estancamiento para uno de los tratados más ambiciosos de la historia reciente del bloque.
Un acuerdo políticamente controversial, pero comercialmente estratégico
El acuerdo UE-Mercosur, alcanzado en 2019 tras más de dos décadas de negociaciones, busca crear una zona de libre comercio entre la UE y los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). En términos económicos, el tratado eliminaría aranceles para más del 90% del comercio bilateral, lo que representa un impulso considerable para sectores como el agrícola, automotriz y farmacéutico.