La jueza Isaura Tórtora condenó a 30 años de cárcel al militar retirado Juan Rebollo por los asesinatos de Diana Maidanic, de 22 años, Laura Raggio, de 19 años, y Silvia Reyes, también de 19 años, ocurridos el 21 de abril de 1974, en el caso de las denominadas Muchachas de Abril, según informó la organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos.
La sentencia surge tras el pedido del fiscal especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe, quien solicitó la condena de Rebollo por “un delito de homicidio complejo, muy especialmente agravado por la pluralidad”. Asimismo, para este caso, se solicitó la pena máxima prevista en el Código Penal “por entenderla adecuada a la naturaleza del delito cometido y los bienes jurídicos tutelados” y “de acuerdo con los extremos”.
“Las tres fallecidas recibieron múltiples heridas de proyectiles de arma de fuego dotadas de alta energía y poder destructivo. El patrón lesional es compatible con haber sido provocado por ráfagas de armas automáticas o semiautomáticas. […] La hipótesis de que las tres mujeres fueran abatidas sin un enfrentamiento armado previo es compatible con todos los elementos que obran en autos. En efecto, la posición de los cadáveres superpuestos, apretujados entre la pared del fondo y el mueble, con múltiples heridas de armas de guerra inferidas de frente y desde su derecha permitiría sostener esa eventualidad”, señala la sentencia, según una publicación de Madres y Familiares.
Además, la Justicia entendió que está “plenamente acreditado que el encausado no solo impartió la orden, sino que intervino en el operativo que ocasionó la muerte de las jóvenes víctimas a consecuencia de los disparos de arma de fuego efectuados contra ellas”.
Por este mismo crimen, también fueron investigados los militares fallecidos José Nino Gavazzo y el teniente coronel Eduardo Klastornik.