Luis Lacalle Pou
A mí, el día antes de una convención, el día antes de cualquier conmemoración del Partido Nacional, me viene una emoción, un sentimiento que no termino de explicar, porque obviamente tiene componentes de tradición, voy a decir que no me ven, lo que natura no da, componentes de tradición, de historia, familiar, personal, y después un componente que está en la esencia del ser nacional, que es la libertad. Cuando yo vengo a un acto del Partido Nacional, me siento más libre que nunca, me siento perteneciente a un cuerpo libre, porque si ni siquiera es una expresión de libertad personal, es una libertad compartida, y cuando en una convención de mi partido, a la que no asistía yo hace seis años, en esa emoción que me antecede o me sigue desde ayer de tardecita, y me acompañó en el camino de entrada, encontrándome con compañeros y compañeras de todo el país, les suma este vídeo. Este vídeo me genera satisfacción, no me genera conformidad, yo creo que la conformidad no está hecha para quienes aspiramos al bien común y el bien de los uruguayos, significaría decir, ya está.
¿Y por qué estoy yo en esto y en el gobierno? Porque yo hace cuatro meses que dejé de ser Presidente de la República, y ya hoy diría, tendría que haber hecho esto, quizás esta decisión la debería haber tomado en otro momento, por supuesto que el balance es positivo, el objetivo, el balance objetivo no el nuestro, no el mío en frente a mi espejo, el del espejo de los uruguayos, los datos, y no las excusas, porque nunca pusimos excusas, si sabemos lo que nos tocó afrontar, si sabemos que terminamos un gobierno con 110.000 uruguayos más trabajando que cuando nos tocó arrancar, sabemos que terminamos un gobierno a lo que los uruguayos les valía más la plata, porque bajamos la inflación, porque bajó la informalidad, porque como bien decía Macarena, la mano del gobierno no miró en cuánto y tanto hubieran votos, porque a los candidatos, a los que recorren el país, a los que salieron temprano en el interior, saben que pasan por Villa Constitución y allí está el CAIF Pequeño Brillante, que si tienen que salir de apuro en Tapia hay una ambulancia de la Policlínica Renovada, porque saben en el Cerro Montevideo que se terminaron 50 años de promesas, porque saben lo que transcurre en la ruta 6 que se unió con el puente 329, porque saben que existe el puente de la Charqueada, porque saben los uruguayos que viven en asentamientos que este gobierno duplico la inversión en aquellos más sumergidos en lo que hace a la vivienda, y si fuera poco, y yo decía eso en los instantes que nunca pusimos excusa, nos tocó estar en el lugar indicado en uno de los peores momentos de la historia moderna de la humanidad, el 13 de marzo del 2020, y vuelvo unos renglones atrás en el discurso, cómo nos sentimos, qué nos impulsó, como pocas veces tan tangible la libertad, si no hubiera gobernado la coalición de gobierno y el partido nacional nos hubieran encerrado, eso era lo que pedían, y por eso satisfacción pero no conformidad.
¿Qué hay detrás de esto? Un análisis, que el análisis tiene autocrítica, pero el análisis es mucho más integral, porque yo y aquí parado tengo que felicitar que se siguió ganando la alcaldía de Bella Unión, a la cual le dedicamos tanto tiempo como partido, como gobierno, y los candidatos de Artigas y Bella Unión, porque tengo que festejar que se ganó nuevamente San Carlos, tengo que festejar que se ganaron otras alcaldías, y allí hay más mano del gobierno nacional, departamental y sobre todo local, y por eso es análisis, porque en la balanza se pone lo que pasó de bueno y lo que no pasó de bueno.
¿Y quién tiene que hacer el análisis? ¿Y los que quieren estar primeros en la fila? ¿O le vamos a pedir al militante ese que quizás da mucho más que muchos de nosotros por el partido y no está en las listas? No, a ese le debemos el análisis, el primero de la fila, yo soy el primero en la fila, yo estuve primero en la fila, con amor, con afecto.
Levante la mano, ¿quién vino hoy acá mal inspirado? ¿Quién vino mordiendo los dientes, de dientes apretados, de mala gana? No, alguno puede haber venido desconforme, alguno puede haber venido diciendo yo quiero hablar y quiero decir lo que pienso, bienvenido, porque ese es el partido nacional. Creo que tenemos que hacer eso en cada departamento. ¿Desde cuándo es un partido mordaza? Si yo me crié siendo rebelde, ahora eso se hace serio, se hace responsablemente y diciendo es para mejorar.
¿O a alguien se le ocurre estar en un partido político para destruir? Ya sé, alguno está pensando que sí, este no es, este no es, este sólo construye, que es la tarea más difícil y más linda de un individuo. ¿Motivos para destruir?
Siempre tenemos, calenturas, broncas, enojos, sobran, pero ¿qué nos hace tener casi 190 años de historia? ¿Qué nos hace? Porque hay algo más que nos une y porque somos el partido de la nación, porque fuimos capaces, fíjense, de juntarnos, de entendernos con nuestro histórico y tradicional adversario, empezamos y terminamos un gobierno de cinco partidos políticos.
¿Ahí qué hubo? ¿Qué hubo ahí? La construcción primó sobre la destrucción, porque además la libertad tiene en su esencia la diversidad, la libertad tiene en su esencia la tolerancia, si no, no hay grupo.
Y yo les quiero comentar, ese es el espíritu que a mí me trae de emoción, inundado una vez más de libertad en mi partido, mirando para adelante, porque no somos una arena histórica. Estoy orgulloso del pasado de nuestro partido, tenemos una historia, no importa si alguna u otra, casi única en la historia del mundo de nuestro partido. Si no nos explica un partido vigente y vibrante, habiendo estado tantos años en la oposición, hay algo más, hay un entrelazamiento con el ser nacional, pero yo miro para mañana.
¿Y qué viene después del sábado 28? Una adivinanza bien difícil, el 29, viene el 29 y viene el 29, el 29 y el 29. No les hablo de presidente, les hablo desde Luis, desde el corazón, que es lo que yo siento, porque uno puede ocupar cualquier cargo, o ninguno como en mi caso. Renuncié a todos los cargos y nunca me sentí tan blanco como estando en el llano, nunca.
Y mañana es 29, que está antecedida de la tarde y de la noche del 28. Ahora, este momento, estamos haciendo historia, chica, mediana, grande, no me importa, estamos haciendo historia. Cada uno en la medida de sus responsabilidades y cada uno sabe.
Ahora, si están sentados entre los 430 y pico convencionales que me dicen que hay acá o más, es porque casi mil ciudadanos dijeron que cada uno de ustedes tenía que estar sentado acá. O sea, ustedes tienen por lo menos mil personas arriba de sus hombros. Y yo quiero que piensen, cuando terminen esta tardecita, que vuelven a su casa y en la puerta de su casa hay mil blancos, esperándolos.
Che, ¿cómo te fue? ¿Qué hiciste? Porque nosotros no somos convencionales. ¿Cómo estuvo? Yo quiero que le digan, vibrante, discutida, lucha electoral y terminamos todos abrazados. Eso es lo que yo quiero.
¿Qué quiere decir? ¿Que estamos todos conformes? No, pero que estamos todos a fin y fecho. Porque hicimos lo que podíamos con las herramientas que tenemos. Y yo vine acá a hablar de las virtudes de mis compañeros.
Ellos tienen virtudes. Yo alguna capaz que también, pero tengo defectos. Hoy me olvido de los defectos de mis compañeros.
Cualquiera de los que encabezan la lista tiene virtudes. Y los conozco. Soy amigo de los cuatro compañeros que encabezan la lista.
Soy amigo de los cuatro compañeros que encabezan la lista. ¿Estoy de acuerdo con lo que hacen? ¿Todo lo que hacen? No. Y soy tan amigo que no nos lo decimos.
Porque eso también muestra la cohesión, la capacidad de unir en el disenso. ¿Cuántos de ustedes les tocó perder? Yo levanto la mano porque me tocó muchas veces. ¿Todos ganaron acá? Vamos, vos también perdiste, pájaro, dale.
Gano la intendencia y ahora está de crack. ¿Todos? Ahora levanten la mano, ¿quién les tocó ganar? Todos ganaron alguna vez. Ganamos una vez.
Bueno, yo lo que quiero que se pongan en las dos situaciones. Quiero que se pongan en lo que sintieron cuando ganaron. Y espero que hayan sido buenos ganadores, porque el buen ganador es el que se tiene que inclinar ante el perdedor y no el perdedor saltar hacia el ganador.
El buen ganador es el que se inclina. Y quiero que piensen cuando perdieron. Duele un poquito, no es lindo, y esperamos que el otro se incline, pero ¿cómo aprendemos? Entonces, la emoción que nos trae hoy acá, lo libre que nos sentimos en esta comunidad, los reconocidos que estamos a los otros partidos políticos que integraron la coalición de gobierno.
Yo le tengo que agradecer al Partido Colorado,al Partido Independiente, a Cabildo Abierto y al Partido de la Gente. Cinco años de coalición, que nos deja un aprendizaje para el 29. Con emoción, con libertad, con agradecimiento, con competencia, con análisis, con autocrítica, con felicitación.
Pensando mañana 29 de junio, pensando en el 2029, pero sobre todo les pido, compañeros y compañeras, piensen en este momento, disfrútenlo, valórenlo y actuemos responsablemente. Muchas gracias.