Con goles de Olivera, Silvera y Cabrera, el equipo mirasol se quedó con un partido que tenía controlado y se le complicó en el cierre.
Peñarol ganó 3-1 en su visita a River Plate en el Parque Saroldi por la cuarta fecha del Torneo Intermedio y quedó primero en el grupo A con 10 puntos, uno más que Defensor Sporting. Además, igualó a Liverpool en el tercer lugar de la Tabla Anual con 37 unidades, a dos de Juventud y a seis de Nacional.
Los darseneros sorprendieron en el arranque, pusieron incómodo a su rival y lo neutralizaron en el primer cuarto de hora, más allá de un reclamo por una acción polémica que se dio en el área local. Jonhatan Fuentes llamó a Javier Feres para que revisara un posible penal por mano de Nicolás Ramos, pero el juez central desestimó tras observar la repetición de la jugada.
A los 11’ avisó el elenco de Julio Ribas con un remate de Facundo de León que pedía gol y tapó Martín Campaña. No generaba el de Diego Aguirre, pero a los 23’ abrió la cuenta. Ignacio Sosa abrió el balón a la derecha para Javier Cabrera, el Cangrejo centró por bajo, el intento de despeje de Nicolás Ramos dio en el travesaño y en el rebote anotó Maximiliano Olivera.
A partir de la ventaja encontró tranquilidad y empezó a tener más la pelota el conjunto mirasol, que sin brillar logró el segundo tanto a los 37’. Después de un par de rebotes, Pedro Milans cruzó un buscapié y Maximiliano Silvera, en posición dudosa y chequeada por el VAR, lo desvió a la red con el botín zurdo tras arrojarse al piso.
Peñarol pasó a manejar el mediocampo con el despliegue y la distribución de Ignacio Sosa y Eric Remedi, y para colmo de River en el tiempo adicionado del primer tiempo fue expulsado Matías Alfonso por un planchazo descalificador sobre Javier Méndez en una jugada muy lejos de su arco, en la mitad de la cancha y sobre una línea lateral.
La jugada más peligrosa para los darseneros se dio al minuto del segundo tiempo, cuando Maxi Olivera intentó despejar de cabeza y la pelota dio en el ángulo. Tras esa pifia que estuvo a punto de ser un autogol, el elenco de Aguirre manejó el trámite sin pasar zozobras, defendiéndose con la pelota y sin profundizar demasiado en busca del 3-0.
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