Con la candidatura del nacionalista Carlos Albisu, la Intendencia de Salto fue durante las últimas elecciones el gran acierto de la Coalición Republicana al juntar fuerzas a nivel departamental para desplazar al Frente Amplio. Los coalicionistas derrotaron a la izquierda tras dos períodos consecutivos con Andrés Lima a la cabeza.
De acuerdo a un estudio de Opción Consultores,, la nueva gestión de Albisu recoge una evaluación favorable en un 59% de los consultados, tiene por el contrario solo un 7% de desaprobación . Por otro lado, uno de cada cuatro indicó que no tiene una valoración «ni buena ni mala», al tiempo que otro 9% contestó que «no sabe/no contesta». La gestión de Albisu encuentra a sus mayores simpatizantes entre los salteños mayores de 60 años y personas de sectores medios y altos.
Entre los frenteamplistas consultados, un 36% aprobó su administración, en contraste a un 46% de votantes frentistas que dieron su visto bueno al desempeño de Albisu .Dos tercios de los consultados respondió que es «bueno» o «muy bueno» el rendimiento del nuevo intendente nacionalista. En ese plano, la desaprobación es de un 6%. Por el contrario, la anterior administración frenteamplista legada por Andrés Lima -hoy presidente del Movimiento de Erradicación de la Vivienda Insalubre Rural (Mevir)- muestra una desaprobación del 52%

